Los plugins son pequeñas aplicaciones que amplían o mejoran el funcionamiento de WordPress. La cantidad de plugins que uses debe estar basada en tus necesidades. Al igual que con cualquier software, no es necesario, ni siquiera recomendable, tener instaladas aplicaciones que no vayas a utilizar. Esto también se aplica a WordPress.
Puedes instalar la cantidad de plugins que desees, probarlos y dejar activos solo aquellos que realmente necesitas. Los plugins que no uses deberías desactivarlos y borrarlos, ya que de lo contrario solo ocuparán espacio y recursos en tu servidor.
En resumen, no es malo instalar muchos plugins, siempre y cuando estén bien programados y actualizados. Dos plugins con un código mal programado pueden ser más perjudiciales que veinte plugins con código limpio y efectivo que utilicen funciones estándar.
